
Caminaba tranquila con un libro entre sus manos y perdida con alguna canción. ¿Qué estaría escuchando? De pronto, como si fuera capaz de leerme la mente, aquella chica se detuvo ante mí y me miró a los ojos durante unos segundos. Yo nervioso, bajé la mirada. Tenía la impresión que si la mirara demasiado su mente desnudaría todos mis pensamientos. Volví a alzar la mirada...ella sonrío y sin más...siguió su camino, sin prisas, con calma caminando por la solitaria y ardiente ciudad.
Lo observé de lejos hasta que dobló la esquina...Aquella fue la primera y la última vez que la vi.
Esto me suena...
ResponderEliminarBuena memoria...:)
ResponderEliminarO_O ¿A qué? :)
ResponderEliminar(¿Va más allá de un relato? Hum.)
Bueno, la intención no era ir más allá...simplemente contar una de tantas sencillas situaciones cotidianas.
ResponderEliminarMuy bueno. Ole la escritora!! sigue así mel. Me encanta como escribes. Vas a ser la mejor escritora!!!
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